Mafia La Ciudad 3 - [Finalizada]

[sinox]

Chullo, si dices a quien proteges pues... se fastidia la sorpresa! xD

[Velli]

Confiamos en tu criterio Chullo, pero no lo digas xD

[Chullo]

Pos venga, como diría Pitbull....

Dale!!

[FelixCefiro]

Serviría de algo que suplicase a Paradox que no me bloquease? Entiendo las sospechas y eso pero sería un pelín desperdiciarlo ^^U

[sinox]

Voto Deke

[Der Metzgermeister]

· Recuento de votos:

Deke: 5 votos (Poison Gilr, Paradox, Chullo, FelixCefiro, Sinox)
Chullo: 1 voto (Deke)


Con 7 jugadores vivos, hacen falta 5 votos para linchar. No se puede votar No linchar. Tenéis hasta las 17:30 del miércoles 9 de Septiembre para linchar.

[Der Metzgermeister]

Aquellas escaleras estaban empezando a resultarle molestas. Después de un escalón venía otro, y después otro, y otro, y luego un descansillo, y luego otra vez otro escalón, y otro, y otro. Intentó subirlos más deprisa primero, pero enseguida se impacientó y empezó a subirlos de dos en dos. Notó que la gargante le apretaba por dentro, como si se le cerrase y de repente no tuviera nada dentro de él. No lo hacía por gozo, en absoluto. Miró hacia abajo por el hueco de la escalera y vio como varios brazos seguían subiendo por la barandilla con algún que otro rostro asomando también y mirándole.

Siguió subiendo como si no hubiera un mañana.

Cuando las escaleras se terminaron, también se terminaron los pasillos por los que pudiera escabullirse. Únicamente había una puerta cerrada a cal y canto. No le quedó más remedio que arremeter contra la puerta con pie y hombro por delante no sin antes haber dejado en el suelo un par de casquillos y un candado reventado en el suelo.

El cielo azul le saludó y durante unos instantes pudo contemplar el resto de azoteas de los edificios adyacentes, que se alzaban como si le mostrasen sus espaldas. Se acercó al borde para ver la calle y hacia qué lado del edificio se asomaba. Una vez situado, comprobó en la medida que pudo una posible ruta de escape. La puerta de la azotea se abrió de nuevo, así que no tuvo tiempo de reflexionar si esa ruta era buena o mala. Simplemente la tomó. Cogiendo carrerilla, empezó a correr hacia uno de los bordes.

-¡Alto! ¡Alto o disparo!

Ignorando por completo el aviso de cortesía, siguió corriendo, calculó los últimos tres pasos antes de aoyar el pie izquierdo en el borde y se dejó llevar por la inercia y la gravedad.

Fue sólo por un segundo. Un segundo tan largo como el silencio que se arremolina alrededor cuando te dicen "Lo siento" o "Adiós" y cuelgas el teléfono. Dejó de oír nada en absoluto. Ni los avisos que le habían dado hace escasos segundos, ni los coches circulando o los ruidos de las multitudes abajo en la calle, llevando a cabo su vida cotidiana sin más. Lo único que fue capaz de discernir fueron varios ruidos sordos provenientes de la azotea que había dejado atrás. Había cerrado los ojos. Después de aquel segundo vinieron los cristales rotos y el sonido de huesos.

-Joder, ¿ha saltado desde aquí? ¿En serio?
-Sí, lo ha hecho.
-¡Me cagüen todo, hostia! ¡Vamos!

En el edificio contiguo un piso más abajo una ventana quedaba hecha añicos cuyos trozos caían a la calle como gotas de lluvia manchadas de sangre que duelen en lo más hondo de uno.

Pero allí no había ningún cuerpo.

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[Der Metzgermeister]

COMIENZA LA NOCHE 5



Tenéis hasta las 23:59 del miércoles 9 de Septiembre para enviar acciones. Si no quieres realizar acción, envía "No hago nada". Si no tienes acción, no envíes nada.

[Der Metzgermeister]

TIROTEO EN EL EDIFICIO _____________

Uno de los involucrados huyó por la azotea y se arrojó al vacío. Varios testigos aseguran que el tiroteo se extendió durante dos o tres manzanas. El balance es de un muerto y tres heridos por daño colateral.

"En la tarde de ayer se produjo un hecho sin precedentes pero que puede ilustrar la inestabilidad política y social en la que se encuentra el país en este momento. Sacudido por diversos casos de que han puesto sobre alerta a la sociedad, el episodio de ayer no es sino uno más en la larga lista de enfrentamientos por bandas de mafias rivales que luchan por el control de zonas y barrrios de la ciudad. El tiroteo se produjo en la tarde de ayer cuando al parecer, varios individuos sin identificar irrumpieron en la cafetería del edificio _____________. El objetivo sería una persona que se encontraba en ese instante en el edificio y que huyó por la azotea saltando..."

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Pasó de página y siguió haciendo como si leyera. Se encontraba sentado en un banco frente a un edificio residencial. En cualquier momento recibiría la señal y tenía que encargarse de que sucediera rápido y sin percances. Detrás un coche aparcaba suavemente al lado de donde se sentaba. Se miró el reloj de pulsera y empezó a doblar el periódico. Sintió una ligera vibración en su chaqueta.

-Todo listo

Ni siquiera tuvo que responder. La comunicación se cortó sin más. Eran profesionales, así se ganaban la vida y él iba a tener que ganársela en los próximos instantes como cada día desde hacía ya más de una década. Después de tantos años metido en el mismo trabajo tenía una rutina, lo que lo hacía bastante previsible y repetitivo, pero también le permitía controlar y conocer de primera mano todos los aspectos relacionados con ella. Respiró hondo, se colocó las gafas de sol y se levantó de su asiento.

Se dirigió a la puerta y antes de que llegara a estar cara a cara con ella ésta se abrió. Dentro dos hombres aguardaban. El primero tenía el ceño fruncido y le dirigió una larga mirada antes de avanzar. El segundo, también con gafas de sol, sencillamente le dedicó un escueto "Vamos" mientras observaba la calle. La puerta se cerró tras ellos y los grises baldosines de la calle se deslizaban bajo de sus pies. Sin embargo, algo inesperado ocurrió. A medio camino entre el coche que había aparcado antes y la puerta residencial, algó pareció chocar contra el suelo, como un golpe hueco. Antes de que se diese cuenta, sonó un segundo golpe. No supo qué estaba haciendo en el momento. Antes de que la consciencia volviera a él, su inconsciente había tomado el control y se había hecho cargo de lo indispensable. El hombre de la mirada fruncida estaba dentro del coche y éste salía raudo quemando rueda contra el asfalto, perdiéndose entre las calles y el tráfico de las manzanas más allá. El segundo hombre se encontraba a unos pasos de él. Tenía las gafas tiradas por el suelo. Le miraba y en sus ojos se podía ver el miedo. Se le acercó tanto que pudo verse reflejado en ellos. Decía algo, pero debía haberse quedado parcialmente sordo. Era incapaz de entender qué es lo que le decía.

-¡Mírame, mírame! ¡Aquí, aquí! ¡Mírame a los ojos!

Se encontraba arrodillado en el suelo. Intentó levantarse pero no pudo. Era extraño, no sentía dolor y sin embargo, no era capaz de intentar ponerse de pie. Entonces notó la mancha en su camisa, debajo de su chaqueta. Poco a poco se iba haciendo más grande. Le vinieron las prisas y quiso pensar en algo rápidamente. En su familia, sus amigos, en él mismo, lo que fuese antes de que fuera demasiado tarde. ¿Tenía mujer? ¿Tenía hijos? ¿Cuántos? ¿Cuál era el momento más feliz? No supo contestar Los recuerdos se le agolpaban todos a la vez y poco a poco la certeza se le escapaba. Se quedó tendido en el suelo boca arriba mientras dejaba escapar un suspiro, mirando al cielo sin saber qué era lo último que quería recordar.

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[Der Metzgermeister]

COMIENZA EL DÍA 6

· Recuento de votos:



Con 6 jugadores vivos, hacen falta 4 votos para linchar. No se puede votar No linchar. Tenéis hasta las 23:59 del viernes 11 de Septiembre para linchar.