Noticias:

Philips desarrolla el CompactDisc; al parecer será un pequeño paso que acercará mas al hombre y a las máquinas.

Menú Principal

Gran Biblioteca de Salethzira (Alquilamos libros sobre Fesfos)

Iniciado por Mystik, 30 de Septiembre de 2009, 21:08

0 Miembros y 1 Visitante están viendo este tema.

Mystik

Todo material colgado en este hilo se encuentra bajo licéncia de Creative Commons y no debe ser copiada a no ser por orden xpresa del autor.



Acepto criticas duras, como las de Khram, ya que son las que mas estimulan a avanzar, pero si puede ser k sean acompañadas de alguna recomendacion, observación. ...
Tmabiés al final de este post añadiré una relació de los eventos que pudieron afectar en la história de los continentes cercanos al mio, no de forma indirecta, sino en forma de rumores, comentarios, etc ...

Sin más os deja la primera introducción de la zona árida de mi nacion. He desarrollado mi propio concepto de Fesfos y he dividido la nación en 3 provincia con 3 tipos de Fesfos.

Si hay alguna duda no dudeis en comentarla por mp, aki solo criticas al relato, no al contexto:

Propuesta de bandera, k os parece? Parte negra representa las llanuras, parte amarilla el desierto, y el árbol y las ohojas la naturaleza del bosque si sus cambios, por eso los 2 kolores del árbol y de las hojas.










Gran Biblioteca de Salethzira









Libro I:Los Humos de Salethzira



Capítulo 1: Nuestra historia. Primer capítulo: Historia del altiplano (zona desierta, este de la nación Salethzira)
Sorry but you are not allowed to view spoiler contents.


Capítulo 2: História de las praderas y el gran Bosque Eterno
Sorry but you are not allowed to view spoiler contents.

Capítulo 3: Acción-Reacción
Sorry but you are not allowed to view spoiler contents.



Libro II: Nuestros paisajes



Cápitulo 1: Salethzira desde el aire
Sorry but you are not allowed to view spoiler contents.




Libro III: Escuchas

Capítulo 1: Te de ag Dumit (Leyenda de la resurreción)
Sorry but you are not allowed to view spoiler contents.


Cronología:

Primera parte (antes de las altas guerras)
Sorry but you are not allowed to view spoiler contents.


Cancionero de Salethzira (Gracias Ageof)



1er Movimiento (Por Mystik, 100% propia)


Canción Desértica



Poesia de Salethzira:

-Cántico de guerra / Fuego y hielo
Sorry but you are not allowed to view spoiler contents.


¿Qué es exactamente un Fesfo?

Sorry but you are not allowed to view spoiler contents.

Mystik

Libro I:



Nuestra historia. Primer capítulo: Historia del altiplano (zona desierta, este de la nación Salethzira)




Muchos tacharan este libro de blasfemia, muchos lo repudiaran y negaran su veracidad, así como su existencia, pero eso será porque no hay nada más doloroso que la verdad.

Empezaré contándoos como era antes de los grandes sucesos nuestra nación, que para entonces vivía en paz con ella misma:
Todos nosotros vivíamos en armonía con nuestra nación, cuidábamos de los árboles, las plantas y los animales que vivían en nuestros bosques, como todo Fesfo. Pero nada es eterno. Más tarde vinieron los Altísimos, y desataron la guerra en nuestro mundo. Pero esa parte de la historia la sabéis todos, ¿me equivoco? Lo que quiero contar es lo que pasó cuando los salvadores alados volvieron a la Madre Tierra y los Altísimos se fueron con la cola entre las piernas.

En esos momentos vivíamos en una conmoción. Muchos de los nuestros habían muerto bajo tormentas, vientos y fuego y ahora, cuando por fin volvía la paz apareció ese nuevo y maldito elemento, el éter. Por suerte en el tiempo que tardo en aparecer ya nos habíamos recuperado de los grandes sucesos porque sino dudo que nunca hubiese llegado a trazar las grafías que aquí veis reflejadas.
Desde entonces muchos han intentado explicar el porqué de la desaparición de la Gran Selva, y el porque de que ahora de ella solo quede un gran altiplano transformado en un árido desierto. No obstante yo conozco la respuesta.

La respuesta reside en el éter, en su esencia y en su capacidad autodestructiva.

El descubrimiento del éter, al menos para los que lo dominaron, no fue lo que nos llevó a nuestra situación. El inductor de lo que pasó más tarde fuimos nosotros. Si, nosotros. Tenemos tendencia a excluir a los poco poderosos, a los Fesfos que no tienen unas cortezas similares a las nuestras, o no tan brillantes, o espinosas (aunque hay a quien las espinas parecen estéticas, cosa que nunca entenderé) de forma que quedaban unos pocos, pues verdaderamente muchos de nosotros somos muy bellos, excluidos de nuestra sociedad y de sus privilegios que fueron formando tribus aparte, erráticas y desconfiadas que se internaron en la Gran Selva para que esta les resguardase, y allí, aislados, sintieron lo que nosotros nunca hemos podido sentir, el éter. Primero unos pocos, pero más tarde muchos de ellos pudieron sentir como la esencia anidaba en sus corazones y les daba esperanza, esperanza por ser aceptados, mas debían aprender a controlar su poder. Craso error.

Primeramente el éter les dejó controlar la esencia de su existencia, la tierra, de donde venían y en donde vivían, pero quisieron ir más lejos.
Más tarde y debido a su esfuerzo el éter les enseñó a dominar el viento, pero ya no tenían el dominio tan perfecto como sobre la tierra. Así su poder aumento, y entonces, el éter reveló su verdadera esencia.
El poder que ahora poseían les había llevado a la euforia, y en esta, la perdición había anidado en sus corazones en forma de corrupción. Ávidos de poder empezaron a buscar por toda la planicie del altiplano otro elemento por dominar, buscaron bajo las piedras, sobre los árboles de la gran selva que cubría todo el altiplano, buscaron en las cuevas bajo este y en las cuevas sobre este mismo, sin darse cuenta de que el agua más que un alivio para su sequedad podría ser un elemento, hasta que llegó una gran tormenta.

Llovió torrencialmente y los Fesfos renegados intentaron dominar los rayos, pero no pudieron... pero los atrajeron, y llovió y relampagueó durante noches y días y días y noches hasta que estos renegados consiguieron, gracias a su ligero control del viento, enviar la tormenta océano allá.
Pero aún así el mal estaba hecho, por primera vez, la Gran Selva ardió, tal había sido la intensidad de los relámpagos.

Y entonces si, los Fesfos renegados pudieron ver el fuego y su efecto destructor. Es evidente pues, querido lector, que ya habrás empezado a deducir que pasó, pero estarás equivocado.

Los Fesfos quisieron dominar el fuego, cierto, y pidieron ayuda al éter, pero ni este pudo hacerles sentir una esencia que era la antítesis de lo que representaban, mas ellos insistieron, y el éter no pudo, y insistieron más aún, y el éter no pudo, pero aún así siguieron insistiendo, y ahí, todo explotó. La esencia del éter se liberó de sus corazones y vagó libre por el altiplano, hizo emerger sierras y las volvió a destruir, hizo llover agua, granizo y enormes sólidas rocas de hielo, provocó grandes vientos y quemó sus refugios y sus corazones.

Pero ellos, renegados desde siempre no quisieron renunciar a lo que ya habían conocido, y clamaron a la tierra y al viento para que no les hiciesen más daño, y estos les escucharon. También clamaron al agua, y apreció que les oía, pero solo se retiraba, lo que quedaba ya solo era pasto para el fuego.

Las lluvias torrenciales habían afilado los bordes del altiplano de tal manera que intentar escapar era una locura, pues ahora ya no eran suaves pendientes, eran escarpados barrancos de cientos de metros de altitud.
Y fue entonces cuando el fuego avanzó.
Se abrió paso entre secas torrenteras, lamió árboles y plantas por igual y subyugó a los Fesfos renegados. Les robó la sed, cosa que pareció un don, pero también les robó el frescor, las verdes hojas y afiló sus espinas, mientras avanzaba por todo lo que encontraba dejando una yerma extensión de muerte tras de sí.

Y fue entonces cuando la madre tierra ayudó su creación. Y envió toda la vida bajo su manto de tierra. Toda excepto ellos.
Les dejó solos sobre la arenisca tierra que había dejada el fuego que ellos mismos habían desatado a modo de castigo por su egoísmo y su falta de moral, así como el intento de represión de su propia esencia para dejar entrar el fuego en su interior.
Y también les marcó, los iris de todos ellos brillaron como el sol y se convirtieron en rojos, unos más oscuros que otros, dotando sus ojos de un burleta tono fuego.

Pero no podía dejar sus criaturas solas y desamparadas pues morirían sin remedio. Ya que el fuego les había dado el "don" de poder vivir mucho tiempo sin agua (a coste de convertirlos en seres de piel del color del desierto, colores amarillos, naranjas claros y más que los hacían parecer hierbajos del desierto) les enseñó a amar el desierto y les enseñó a conocer sus secretos y a organizar una sociedad propia, donde nadie les repudiase.
Les enseñó a sobrevivir en él y a cuidarle. Pero también les enseñó a luchar, les enseñó a usar sus púas para herir de gravedad, a tener paciencia estando debajo la arena para matar a aquel k se acercarse sin darse cuenta y también les enseñó el secreto por el k son tan veloces. Su sequedad les dio fuerza pero les quitó peso, eran duros pero ligeros, y les enseñó a planear usando su mediocre control del viento, y así se convirtieron en amos y señores del altiplano.

Muchos me preguntan cuando les cuento esta historia porque no escaparon volando. La respuesta es que podían volar horizontalmente, pero verticalmente la fuerza debía ser mucho mayor y el control del aire para no caer y morir mucho mejor.
Y cuando la Madre Tierra estuvo convencida de que ya estaban civilizados, resquebrajó el suelo, y una gran grieta se abrió en la parte sud del altiplano, dejando vía libre para subir y bajar de este.
Mas ellos nunca se marcharon, fueron los demás los que quisieron entrar y ellos no les dejaron. Y así empezaron las Guerras Espinosas entre Fesfos originales y Fesfos del desierto, o como más tarde les llamarían, Deftos. Y aún tener otro nombre como tribu y raza, seguían siendo Fesfos, lo que les dolió que les volviesen a repudiar, y así reforzaron su frontera. Vigilaban la grieta día tras día, y así forjaron su capital, con roca amarilla del desierto y nácar de los bordes del altiplano, a la que llamaron Igathzira, en honor a lo que antes consideraban si hogar y para expresar su intención de crear una sociedad Igualitaria donde no se discrimine a nadie por su aspecto, defectos, ...

Y las Guerras Espinosas duraron, y mucho, hasta que unos extraños Fesfos de corteza oscura se presentaros y mediaron en el asunto, enseñando la diplomacia a unos y otros, y así empezó un periodo de prosperidad para los Deftos, que empezaron a comerciar con diamantes que habían encontrar en el altiplano con los Fesfos y los extraños Fesfos de corteza oscura (más adelante explicaré su história) y a comerciar con otras naciones, con las quien pactaron y permitieron tener puertos comerciales a lo largo de su costa.
Eso sí, pocas veces los Deftos se alejan de su desierto, y si lo hacen es para viajar hacia otras zonas áridas de Bardha, donde encontrar otros habitantes de los desiertos y compartir conocimientos.




Mystik

Libro I:
[/size]

Capítulo 2: Historia de las praderas y el gran Bosque Eterno
[/size]

El Bosque Eterno, lugar lleno de vida y pasión por ella. Donde los árboles crecen a placer, las flores resplandecen en sus claros, los animales pastan a sus anchas y lugar donde la esencia de los Fesfos se manifiesta en todo su esplendor. 
Aunque hay zonas en que toda esa belleza ya no se observa y que ahora son meras praderas donde pacen grandes rebaños.
Las Praderas de la Verdad son este páramo, que probablemente fue el que más sufrió durante Los Incendios, o como aquí prefieren llamarlos: Los Humos.
El que haya contado primero la historia de lo sucedido en el altiplano no es una mera formalidad alfabética. Es una necesidad conceptual, pues es evidente que este libro puede caer en manos de mentes débiles, con poco potencial, no como las nuestras y no sabría relacionar hechos.
Aunque para algunos puedan parecer pueriles, estas líneas son los efectos lógicos de los episodios de Salethzira. Inmediatamente después de Los Incendios la gran humareda que estos provocaron tapó por completo el astro reinante. Así pues, la zona más afectada por esta nube impenetrable fue la zona más cercana a la costa una vez pasadas Las Espinosas. Esta zona como ya habrás imaginado quedó totalmente sombría y la temperatura empezó a descender, los flores a marchitarse y los árboles  a doblarse bajo el peso de sus ramas. Los Fesfos también perdieron parte de su vitalidad pero tenían la esperanza que esa pesada nube de frío pasaría sin más efectos. Así decidieron seguir morando en esa zona de la nación,  pero ahí no acabó todo, pues la lluvia hizo acto de presencia.
Todo pasó muy lentamente. Al principio fue una lluvia muy suave y tranquila, que sació parcialmente la sed de vida de todas las plantas y animales de esa zona. Pero más tarde el cielo se empezó a oscurecer más, si eso era posible y la lluvia se intensificó. El Río Cristalino empezó a desbordarse, y presentaba un color muy oscuro. Nadie supo porqué hasta que fue demasiado tarde.
Unos días después de empezar a llover la lluvia empezó a oscurecerse, y eso, mató a todos.
El vapor de agua de las nubes se había mezclado con la ceniza y ahora era un agua ácida, ardiente.
Los árboles más grandes pronto empezaron a morir, pues absorbían gran parte de esa ceniza, y los Fesfos de allí, desesperados empezaron a crear cúpulas con los ramajes de los árboles muertos para protegerse a ellos y a lo que quedaba de bosque de esa lluvia mortífera. Y lo consiguieron, pero solo por una noche. Al día siguiente la lluvia se intensificó súbitamente y el río salió de su cauce para convertirse en una serpiente devoradora de bosque, que ahora burbujeaba debido a su gran concentración de productos químicos que se combinaban en peligrosas reacciones químicas. Las cúpulas cedieron bajo la torrencialidad del diluvio y los Fesfos sintieron, por segunda vez en su historia, que su esencia cambiaba, la antigua se volatilizaba con gran dolor para ellos y la nueva les invadía sin permiso arrasando con todo lo que tenía por delante...


Fuera de los límites de esta lluvia, pero, la vida era otra cosa. Los Fesfos seguían viviendo en armonía con ellos mismos y con la naturaleza que les rodeaba. El bosque Verde brillaba bajo la luz del reluciente astro reinante y crecía formando maravillosos e idílicos paisajes. Verdana, la que en ese momento era la capital de Salethzira se alzaba imponente entre los granes árboles del centro del Bosque Verde. Sus altas torres azules, verdes y amarillas se alzaban señalando el cielo azul que se elevaba sobre todas las cabezas de sus habitantes.
La ciudad de secreta de los Fesfos de Salethzira y probablemente capital en esos momentos de todos los Fesfos del mundo era un misterio para todas las demás razas.
Esta ya existía antes de la llegada de los Altísimos, mas su existencia era el secreto mejor guardado de los Fesfos. Esta ciudad era un refugio para cualquier Fesfo del mundo conocido. Si bien tenía sus leyes, no eran iguales a las leyes de las demás razas. Porque tampoco no ellos eran iguales que las otras razas del mundo.
Los Fesfos eran la raza perfecta, ¡maldita hipocresía de los demás si osan negar mis palabras! Vivían en una sociedad sin gobernantes, todos trabajaban para el objetivo que cada uno de ellos creía prioritario. Y para todos era le mismo: La perfección de su naturaleza.
Los más indicados para trepar trepaban, los mejores podando podaban, y cada uno cumplía y nadie se quejaba, pues ese era su sueño y su función.
Y así habían forjado esa ciudad, centro cultural, espiritual y económico de los Fesfos.
Toda la ciudad vivía. Toda. Los Fesfos de allí habían encontrado las plantas más resistentes y grandes del bosque, y con mucha cura las habían moldeado hasta conseguir esas 3 torres que se elevaban hacia el firmamento. Cada una un poco alejada de la ciudad formaban los vértices de un triangulo que señalaba los límites de Verdana.
La torre norte se elevaba cubierta de las pequeñas y verdes hojas propias de la gigantesca planta que la constituía. La torre del sud-este de la ciudad se elevaba cubierta de pequeñísimas florecillas amarillas, contrastando con las enormes flores azules que recubrían las torres del sud-oeste. Y entre todas ellas se elevaba Verdana, un cúmulo de plantas enormes donde vivían los Fesfos y que ellos mismos habían amoldado a sus necesidades. Verdana bebía del Lago del Cristal , nombrado así por sus aguas cristalinas.
Pero aún así, estos Fesfos veían con preocupación como sobre la zona sud de su Bosque Verde diluviaba agua de fuego y mataba todo lo que encontraba. Mas esta preocupación se transformó en miedo cuando una semilla contaminada cayó en territorio sobre el que no llovía, y ahí donde brotó esa planta murieron todas las demás.
Así, cuando las lluvias cesaron y los Fesfos supervivientes empezaron a llegar a la frontera entre la zona muerte y el Bosque Verde se les negó la entrada.
Pero siguieron llegando supervivientes, y acamparon algo lejos de la frontera y de las saetas de sus defensores. Uso defensores que cada vez veían más claramente el dolor  de los supervivientes, aunque ahora estuviesen manchados y su piel fuese muy oscura, demasiado oscura para ser Fesfos, y decidieron matarles para ahorrar ese sufrimiento.
Todos los demás Fesfos del Bosque Verde (o lo que quedaba de él) estuvieron conformes con la decisión y una noche los Fesfos del bosque lanzaron unos proyectiles que odiaban pero que sabían que era la forma más rápida de acabar con un Fesfo, saetas llameantes y grandes barriles de combustible incendiario.
Pero nadie esperaba lo que ocurrió a continuación. Del infierno que se había convertido el campamento de los supervivientes aparecieron unos Fesfos en llamas, andaban lentamente pero con seguridad hacia el bosque, hasta que formaron una línea llameante frente toda la frontera entre la zona muerte y el Bosque Verde. Y entonces uno de ellos avanzó y ordenó que se llevara ante ellos un representante de los Fesfos del bosque. Pasaron unos minutos antes de que se presentase un Fesfo alto, de casi 3 metros de altura. Se miraron fijamente con el Fesfo superviviente que había hablado y que seguía en llamas, aunque parecía que no le afectasen, ni a él ni a ninguno de los demás Fesfos que ardían. Y este exclamó:
-Desde hoy, nosotros nos autoexcluimos de vuestro bosque y vuestras tradiciones pero vosotros no volveréis a atacarnos. Nosotros viviremos en la zona que una vez murió pero que ahora renace en forma de praderas y bosques aislados, bosque de unos árboles con las mismas cualidades que nuestras cortezas, y cuando creamos que estamos preparados os dejaremos pasar, hasta ese momento que terminantemente prohibida la presencia de los Fesfos que habitan este bosque a estas praderas, praderas que revelarán para siempre la verdad sobre la existencia de la maldad, y que a partir de ahora pasan a ser nuestro territorio y a llamarse Planicie de la Verdad en honor a este hecho. Así pues os dejaremos a vosotros en vuestro boque eternamente vivo.

-Superviviente, ¿sabes con quien estas hablando? Creo que no. Estas hablando con el considerado mejor artesano Fesfo y por eso ya me deberías tener un respeto. Pero entiendo que no lo tengas. Es más, entiendo que nos odies. Y esto de hoy pasará a los anales de la historia, tu nos has invitado a estar en nuestro bosque eternamente vivo, al que a partir de ahora, yo y todos los que me quieran seguir llamaremos Bosque Eterno , y también llamaremos a la antigua Verdana:  Los Eternos .
Así honraremos el pacto que hoy aquí se ha forjado.

-Me parece bien, artesano de la vida.

-Entonces no hay más de que hablar, superviviente.



Y en ese momento se forjo la primera alianza entre Fesfos de más de un tipo, entre Fesfos del Bosque y Los Supervivientes , nombre con el que se les conocería por toda Salethzira.

Y así aparecieron las 3 especies de Fesfos: Fesfos del Bosque, Supervivientes y Deftos.

Mystik


Libro I:


Me acomodé en la acolchada butaca de la biblioteca y volví a coger el primer libro que había seleccionado, para ver si aparecía alguna referencia a esos dioses de los que hablaba la guía geográfica. Entonces abrí el libro por la página correspondiente y empecé a leer:



Capítulo 3: Acción-Reacción


-Il lada gath, Salethdulien de ag dumit.

-Nanath tho dev nath shoten zathagath, Latherdumit


Estas palabras, aquí escritas en nuestro idioma, no en tu idioma sino en el de los Fesfos, lector, son las palabras que dijeron los elfos del capítulo anterior para sellar el pacto entre Fesfos del Bosque y Supervivientes. Y probablemente sean las palabras más importantes de nuestra historia moderna.
A raíz de ese episodio se iniciaron las campañas de reconstrucción de lo poco que quedaba en las Llanuras de la Verdad. Los bosques de árboles supervivientes fueron rápidamente aislados y empezaron a crecer prolíficamente bajo los atentos cuidados de los Supervivientes, que se empeñaban en todas las tareas que podían para así olvidar lo que en ese momento ellos consideraban la mayor desgracia que les podía haber pasado: Ser los únicos Fesfos del mundo que no tenían la esencia de los Fesfos puros en su interior. No sabían que en ese momento sus vecinos de la que en su momento había sido la Gran Selva pasaban por un trance más duro que el suyo, pues estaban solos.

Aquí y allí empezaron a aparecer las primeras colonias de Fesfos, más estos ya no vivían en las casas hechas de plantas donde vivían antes de las grandes lluvias, pues habían quedado destrozadas y completamente inutilizables después de los diluvios ácidos que les habían azotado.
Así pues alzaron casas de piedra, y como no habían perdido el arte de modificar la naturaleza a su antojo, aunque con la piedra no tenían ni por asomo la maestría de otras razas, levantaron casas firmes, capaces de resistir el azote de cualquier tormenta sin que el agua de esta entrase dentro de sus habitáculos. Pero lo que diferenciaba estas casas de las casas de las demás razas era que el suelo seguía siendo el mismo que en el momento de edificación de la casa, pues ahora ese suelo, esa tierra oscura y rica en elementos ardientes y agresivos era su símbolo de identidad y se sentían a gusto con él.

Y entonces empezó a despertar un sentimiento de amor propio y de orgullo que desde que las nubes de humo les habían tapado el solo no habían experimentado.
En el momento en que la primera casa quedó terminada, el primer árbol quedó bellamente trabajado y despertó a la vida el primer Superviviente engendrado después de la destrucción, apareció el primer estandarte, la primera sonrisa, el primer himno...
Los Supervivientes despertaron de ese letargo en el que la conmoción de los últimos sucesos les había dejado, y apareció, entonces, la cultura más fértil que nunca sería forjada en esos parajes.

En medio de las grandes llanuras, a unos 2 kilómetros del Río Ardiente se formó la primera colonia importante de edificaciones. No tenia nombre, pero al poco las puertas de las casas, de madera ignífuga empezaron a aparecer con bellos tallados donde se representaba un bello árbol y se coloreaban estas puertas del negro más oscuro que se podría encontrar en esos parajes. Y las casas se pintaban de todos los colores oscuros: azul marino, granate... y así empezó a forjarse una cultura.
Y esa cultura se estableció, y aparecieron los comerciantes, los grandes comerciantes supervivientes, tenaces y limpios en sus negocios, y la nación de los Supervivientes creció, y aparecieron algunas otras colonias. Creciendo así también su fama, hecho que propició la aparición de cada vez más visitantes Fesfos de todo el mundo, a los que se fue permitiendo la entrada progresivamente a las Llanuras, y entonces, y por primera vez, se reunieron los tres tipos de miembros de nuestra especia, se dice que fue en una reunión secreta entre Deftos que no querían vivir apartados del mundo, Supervivientes que querían abrir perspectivas de comercio y Fesfos del bosque que implemente querían ver su nación brillante de belleza y perfección, y que gracias a esa reunión se consiguió llegar al acuerdo de detener las Guerras Espinosas y conseguir, al fin, una Salethzira unida, como había existido en tiempos más viejos, que en este libro no recojeré.

Y así, desde entonces, esa cultura se ha ido enriqueciendo más y más hasta llegar a la cultura que tenemos hoy en día aquí, en Salethzira. Las tradiciones se han ido forjando, como el  Día de la Polinización, o el Día Mundial de la Flor de Primavera, que ahora ya son tradiciones nuestras, de todos los Fesfos del mundo, y que enriquecen nuestra cultura y dignidad.

Una dignidad, que aún así creo manchada, manchada por esos dioses, esos creadores y destructores, esos inmensos e inconmensurables seres que ahora intentan imponer sus leyes y su orden en nuestra apacible nación. Si, ellos... Dumit, Saleth, Rath... solo nombres, nombres simbólicos para ideales, nombres para controlar a los débiles, nombres para gobernar.
Y no podemos seguir así, sus cultos ya están avanzando, en ciertas zonas ya se erigen grandes templos a esas divinidades y ya aparecen cantos espirituales para acercarnos a ellos.
¡No! No podemos seguir así, esos falsos predicadores simplemente atribuyen a esos seres superiores, a esas divinidades hechos como la destrucción de La Gran Selva o la creación de las Llanuras de la Verdad. Obviando un pasado que no quieren ver, un pasado cargado de culpa, desolación e insolidaridad que de otra forma estaría marcado a hierro candente en la conciencia de todos, pero que gracias a estos seres sobrenaturales se puede atribuir a otra clase de sucesos. A los milagros, y es por eso que os escribo, para que conozcáis la verdad en tiempos venideros, pues ahora aún nadie ha olvidado realmente lo que ha pasado, aunque ya haya quien se aferre a esas figuras. Pero no se si esto durará mucho, y en ese caso, que no muera nuestro conocimiento y nuestro saber, que no muera nuestra esencia. La esencia de la verdad, de la pureza y el crecimiento mental, pues es lo que hemos forjado ante todos, y no merece perderse en la oscuridad del remordimiento y el olvido.

Y ahora, en mi último intento para abrir los ojos de mi sociedad, os contaré el como de la aparición de esas divinidades.
Esta aberración empezó a forjarse en el inicio de las guerras Espinosas por parte de los Deftos del desierto que eran capturados por los Fesfos del exterior del gran altiplano. Estos, en los interrogatorios, cuando se les preguntaba por la forma de vida sobre el altiplano y la posibilidad de esta mentían, atribuyéndoles a ciertas divinidades inventadas la posibilidad de vivir, resistir el calor, etc.... sobre el altiplano, y los rumores sobre la existencia de estos dioses se empezaron a propagar por toda la nación, excepto por los alrededores inaccesibles del altiplano. ¡Incluso en el Delta de la Vida empezaron a aparecer clérigos! Fesfos que afirmaban haber sido seleccionados por los dioses para guiar a los demás, para salvar nuestra nación, y para gobernarnos en la paz.
¿I para que? Pues sencillamente, por miedo a ser culpados por haber marginado a los que se convirtieron en Deftos, o por el hecho de no haber ayudado a los Supervivientes, y así esta mentira se fue expandiendo hasta que algunos pequeños solo conocieron esta, y no lo verdad. Y así estamos acabando, estamos autodestruyéndonos solo por vergüenza, vergüenza que yo ya no siento, sino rabia hacia los crédulos, los ignorantes y los temerosos. Rabia hacia los que acabarán olvidando nuestro pasado, destruyendo nuestro futuro, solo rabia...

Mystik


Bien, las cosas parecía que iban como el maestro me había explicado, mas algunos detalles no acababan de quedarme claros, ¿sería por esa multiplicidad de nombres? Me levanto de la raída butaca en la que estaba leyendo y con el libro de historia bajo el brazo me dirijo hasta la sección de geografía, allí encuentro rápidamente el libro que necesito y vuelvo pausadamente a la relativa comodidad de mi anterior asiento. Abro el libro que acabo de coger por la primera página y empiezo a leer sin perder, eso sí, el punto del libro anterior:


Libro II: Nuestros paisajes


Nota del autor: En este libro he intentado plasmar lo más gráficamente nuestros bellos paisajes y sus más grandes curiosidades, empezando por sus características más generales y profundizando cada vez más hasta sus mismas raíces. Sin más os dejo con la más extensa y variada descripción de nuestra nación y sus secretos.


Capítulo I: Salethzira desde el aire.





Salethzira, aún transmitir una sensación de enormidad por sus extensos bosques y accidentes geológicos realmente no es más que una pequeña porción de este mundo tan nuestro llamado Bardha.
Cuando uno se pregunta porqué los dioses fueron tan caprichosos respecto nuestra geografía nunca encuentra otra respuesta que no fue más que una pequeña bella joya en medio de las grandes llanuras que forman los demás territorios del continente.
Para irnos situando, Salethzira se encuentra en la costa sur de nuestro continente, un poco tirando hacia el este de esta costa, siendo limítrofe con Avasn, Eron y coincidente en un pequeño punto con Airan.
Una vez situados medianamente podemos empezar con una descripción más precisa de Salethzira. Para ello utilizaremos el mapa del inicio de este capítulo, que esta dibujado en base a un viaje aéreo que nuestros cartógrafos consiguieron llevar a cabo hace unos meses.
La descripción empezará en Los Eternos (véase el mapa), una bella ciudad natural que describiré en capítulos dedicados a las tres grandes capitales de Salethzira.
Los Eternos está situado en el mismo centro del Bosque Eterno, junto al Lago del Cristal. Este lago es muy conocido entre los Fesfos del bosque pues se  dice que su agua contiene la misma esencia del bosque y de ahí su agua tan pura y cristalina que refleja la luz del sol de tal manera que desde la distancia parece un segundo cielo pero en la tierra, pues refleja la luz de este. El lago y Los Eternos están rodeados por el Bosque Eterno.
Este bosque es, probablemente el más maravilloso de todo nuestro mundo. Los Fesfos que en él residen han moldeado, durante años, los árboles de este, dándoles formas únicas para cada uno, unos retorcidos pero misteriosamente bellos, otros sobrios y elegantes como los artesanos que los amoldaron. Este bosque se extiende por el norte hasta Las Espinosas (véase en el mapa) y desciende a su lado hacia la costa hasta encontrarse con el Río Ardiente, y hace le mismo recorrido descendiendo por nuestra frontera oeste hasta la misma altura que su vertiente de Las Espinosas.
Al acabar este majestuoso bosque encontramos la Planicie de la Verdad, surcada por el Río Ardiente. Esta recorre toda la costa oeste hasta Las Espinosas.
Bien, este páramo básicamente está formado por vastas extensiones de fina hierba y algunos bosques aislados de madera ignífuga. A un centenar de metros del Río Ardiente se encuentra nuestra actual capital. Esta se encuentra rodeada por enormes praderas con unos caminos marcados en el suelo debido a su gran uso por el comercio etc.... y marchan en todas direcciones

Situadas a modo de columna vertebral de nuestra nación encontramos Las Espinosas. Grandes montañas conocidos por la altitud de sus cumbres y la dificultad de su paso excepto para aquellos que conocen sus pasos. Las espinosas están formadas de granito y piedra calcárea y sus escarpadas vertientes muestras una vegetación austera y escasa, teniendo suerte si en un día de viaje nos cruzamos con más de una docena de árboles y algunos matorrales más. Pero la gran dificultad de su traspaso está en su clima. El viento aúlla en ellas y las tormentas braman sobre ellas con ímpetu y rabia, dificultando enormemente su traspaso.
Y al otro lado de estas se encuentra la zona más extraña de nuestra nación, un gran altiplano sobre un terreno selvático, un altiplano que guarda un gran misterio de los dioses, un gran y agreste desierto. Pero primero hablaremos de lo que rodea el desierto.

El gran altiplano está rodeado de una frondosa selva. Esta selva es de las partes más desconocidas de todo Salethzira, en ella habitan unos Fesfos similares a los del bosque mas sus costumbres son más salvajes y no siguen las directrices de los demás. De estos Fesfos y sus costumbres ya hablaremos más adelante en un apartado dedicado solamente a ellos pues son realmente curiosos. En esta selva pasa el otro río principal de Salethzira, el Río Deseo. Este río proviene de las montañas al norte del altiplano y desaparece bajo este de forma paulatina para aparecer en forma de grandes fuentes en la zona sur del altiplano.
Este río acaba en un delta, uno de los símbolos de nuestra nación. En este viven los Fesfos de los manglares, esos Fesfos tan famosos por sus coloridas flores en primavera. Este delta lleno de tierras pantanosas y islitas de tierra seca donde habitan esos habitantes. Y en el delta crecen esos bellos árboles de ramas dormilonas que parecen caer sobre la tierra como lluvia.
Y finalmente el desierto. Este esta situado sobre el famoso altiplano. Las paredes del altiplano son extremadamente escarpadas y altísimas de tal manera que es imposible escalarlas. La única forma de llegar al altiplano es a través de una gran grieta que los dioses dejaron ahí para permitir el paso a este. El altiplano está poblado de oasis, probablemente gracias a las aguas del Río deseo que fluyen bajo el altiplano.

Y hasta aquí esta pequeña introducción a esta gran guía de paisajes y lugares más bonitos, curiosos e impresionantes.

Mystik

Leyendas Fesfas:


Te de ag dumit (Leyenda de la resurrección):


Cuentan... Cuentan que antes de todo, incluso del antes mismo, hubo una flor, y una primavera. Dicen... dicen que antes del nuestro, miles de universos brotaron de las semillas de esa flor primogénita. Y hablan... quienes hablan, de que el nuestro, el último, fue el elegido.
Miles de millones de veces mil astros aparecieron sobre los cielos de nuestro mundo, decorando el tapiz primario del universo. Más tarde, el gran astro apareció, y el segundo tapiz estuvo completo. Tiempo pasó entre luz y penumbra, entre frío y calor, entre nada y todo, y el universo parecía completo. Nada cambiaba, nada. La rotación de la bóveda era inmutable, eterna, y seguía bajo la sombra de los inmensos pétalos del inicio.
Mas un día, una era, un milenio, un segundo... algo cambió. Una tercera capa, muy tenue, rozando la inexistencia empezó a cobrar forma. Era la última capa, como el último toque de un pintor a su obra de arte más sublime, aunque en este caso, era la más perfecta.
Y en esta última pincelada, suspirando, finalmente brotó otra flor. En una esfera de tierra, agua, aire, fuego y metal, un pequeño brote vio la luz, que ya tanto llevaba ciegamente iluminando.
Rápidamente, esta flor se multiplicó, cual su madre primogénita, y el mundo empezó a florecer. En tierra y mar aparecieron exuberantes plantas de todos los colores, como felicitando al cielo por tan digna creación. Y bajo el manto de vida, empezaron a correr pequeños seres. Seres extraños, naturales, capaces de entender la naturaleza y el universo. Seres de piel verdosa, marrón, cual troncos y tallos, y de ojos atentos a cualquier detalle que su alrededor les ofreciera... Seres que rápidamente empezaron a vivir en armonía con su entorno, o su entorno con ellos, pues no seria posible establecer un orden según la armonía reinante, y en ese momento, el bosque, la selva, la estepa... empezó a pensar. Miles de estos seres, Fesfos, se diseminaron por el mundo, y para su grata sorpresa, descubrieron que otras especies estaban apareciendo. Una de ellas provenía del agua, otra del aire, y otra de las mismas entrañas de la tierra. Ninguna de ellas rivalizaba por tener lo de los demás, y así, otra vez, apareció la armonía.
Cuentan... Cuentan que después de la vida viene el descanso.  Dicen... dicen que después de estos hechos esa primera flor liberó sus dos esencias, creadora y destructora, y consiguió reinar en armonía... Y hablan... quienes hablan, de que esas esencias vendrán a nuestro mundo, y romperán el equilibrio.



Tarthen, primer oyente de la vida.

Mystik

Qué es exactamente un Fesfo? Parte I

Características físicas:

La complexión física de un Fesfo original (de los bosques) se basa en:

-Su altura varía de unos dos metros hasta 3 metros alcanzando en casos límite metro i medio y cuarto metros de altura.

-Esta altura se distribuye de forma parecida a la de los humanos excepto por que la cabeza es ligeramente más grande, unida también al tronco del cuerpo por un cuello muy robusto y macizo. Así pues también remarcar que el cuerpo y las piernas siguen una distribución irregular, existiendo Fesfos con largas piernas y Fesfos que prácticamente son cuerpo (estos últimos son muy escasos).

-En cuanto a las extremidades son un caso peculiar. Los brazos y las piernas se mueven entre 2 y 4 en número, existiendo sujetos con 8 extremidades (también muy escasos). La mayoría de casos constan de 2 a 4 brazos y 2 piernas. Normalmente tienen los 4 brazos simétricos aunque no siempre es así. Las piernas siempre son simétricas. (Esto pasa porque en plantas el tener más material genético del que tocaría tener muchas veces no las mata sino que les provoca mutaciones que mejoran algunos de sus aspectos). Al final de dichas extremidades encontramos unas manos y pies humanoides aunque no siguen la norma de 5 dedos sino que estos son variables.

-Su cabeza es algo más grande que la de los humanos, debido también a la mayor altura que ostentan los Fesfos, aun así en Fesfos más bajos en estatura esta norma sigue vigente y tienen la cabeza algo más grande de lo que parecería normal para un humano. En la cabeza de los Fesfos encontramos que no tienen pelo. En cambio pueden aparecer pequeños brotes ocasionales y flores en época de floración. En su rostro encontramos dos o tres ojos, los ojos son por entero  del mismo color, que puede ser cualquiera. Estos ojos están en la misma posición que en los humanos. Los Fesfos tienen nariz pero no la utilizan para respirar sino para captar el aroma de la naturaleza. También es un medio de recolección de esporas en suspensión en el aire, que es un sistema de comunicación no verbal Fesfo. No tienen letras nasales por este mismo motivo en su vocabulario y cuando hablan las demás lenguas tienen un acento extraño pues no pronuncian las "enes", etc.... como tal.  Tienen una boca que usan para respirar y para articular sonidos con los que hablar. Respiran como los humanos.

-La piel de los Fesfos es parecida a la corteza de los árboles. Pero eso es solo lo que aparenta. Tienen una piel rugosa, más resistente que la de los humanos y fría al tacto. Pero es más sensible que la de las demás razas pues desde siempre han vivido con las texturas de la naturaleza para aprender de ella. A veces incluso aparecen brotes en esta piel y florecen. Un Fesfo en época de floración es bellísimo. En el caso de los Supervivientes la piel es menos sensible y es ignífuga y en el caso de los Fesfos del desierto su piel es también menos sensible pero mucho más dura y sin brotes, con espinas.

-El interior de su cuerpo esta repleto de órganos, muy diferentes a los humanos, que ya explicaré, excepto los pulmones y un tipo de vías de circulación para sus substancias. Aparte de su gran capacidad de regeneración, pueden regenerar (no sin trabajo y tiempo) cualquier extremidad y parte no básica para su supervivencia. Los Fesfos comen una dieta vegetariana y también tienen cierta capacidad fotosintética que ya explicaré la utilidad más adelante. Cuando un Fesfos sufre una herida no mana de ella ninguna sustancia sino que queda cerrada herméticamente la herida al momento, aun no cerrarse en su posición anterior.



Su fuente de energía/alimentación: Los Fesfos, sean del tipo que sean se alimentan de plantas exclusivamente. Su método de introducción de la comida en su organismo es parecido al de los humanos, excepto que los Fesfos (solo comen hojas y tallos verdes, aparte de frutas y verduras) tragan directamente su comida y la digieren en su interior. Esta es su principal fuente de energía. Aún así, los Fesfos tienen la capacidad de llevar a cabo la fotosíntesis gracias a su piel basada en la fusión de piel animal y piel vegetal. Pero esta fotosíntesis tan solo es una sombra de la fotosíntesis real, la de las plantas, por lo que solo les permite sobrevivir, y casi sin moverse. Este recurso es muy utilizado en emboscadas en las que hay que esperar mucho, misiones de espionaje o largas meditaciones (muy comunes entre los Fesfos, sobretodo entre Deftos).


Su piel: Solamente destacar que la piel de los Fesfos no es corteza de un árbol o planta, sino un cruce entre corteza y piel animal, por lo que si le crecen brotes es espontáneamente y por primavera, así como la aparición de hojas dispersas o flores.

Casos de cuatro piernas y cuatro brazos: Solo aclarar que son muy escasos y que se dan básicamente entre los Fesfos que viven en pantanos, etc. Pues esta configuración les ayuda a camuflarse entre las plantas que allí habitan (las de las raíces fuera del agua típicas)

Mystik

Cronologia de Salethzira: Parte I, antes de las altas guerras.


Cronología:

Aparición de los Fesfos (1150 antes de las guerras): Leyenda de la resurrección (Te de ag Dumit)
Conclave mundial de Fesfos (900 a.G.): Primer encuentra mundial de Fesfos, se congregaron los mayores artesanos Fesfos del mundo así como todo aquel que desease participar en la zona que hoy en día conocemos como Los Eternos. Decisión de la no participación a ser posible de conflictos de otras razas. Creación del concepto de "Nación de Salethzira", entendiendo Nación de Salethzira las tiarras Boscosas hasta Las Espinosas. L a Gran Selva aún no se consideraba parte de Salethzira.

Fundación de Verdana (855 a.G.): Año en que se considera la gran colonia del ahora llamado Bosque Eterno una ciudad Fesfa de pleno derecho. Transformación de Verdana en capital de Salethzira.

(Inicio y final)Primera guerra Civil (650 a.G.): Estallido de la Primera Guerra Civil Salethzariana a principios de este año debido a los cortes de árboles masivos en la zona de Verdana, ordenada por Taket, Dumat y Tritek, los entonces tres mayores artesanos de la Nación. Finalización de esta con el destierro de estos tres últimos al descubrir que habían recibido sobornos en plantas exóticas desde el exterior. Se cree que de alguna nación que necesitase madera. Cierre de las fronteras de Salethzira tanto para entrar como para salir. Años oscuros al mundo y brillantes en la creación de técnicas de cuidado de árboles y plantas, y perfeccionamiento de estas.

Tratado de libre movilización (507 a.G.): Tras 143 años de cierre al exterior Salethzira abre sus puertas. Ha madurado y se ha estabilizado después de la Primera Guerra Civil. Se empiezan a establecer los rangos de artesanos en la nación (de mayor a menor sin rangos intermedios ni rangos funcionales: Artesano Superior- Gran Artesano-Artesano de la vida-Artesano de la madera-Artesano del tallo- Artesano de la raíz-Artesano de los brotes- Artesano- Iniciado en el arte- Aspirante al dominio). Estos rangos no se dominan entre ellos sino que se enseñan. Aún así los rangos mayores siempre tienen mayor peso moral.

(Inicio)Segunda guerra civil (Guerrillas del Krathlat) (450 a.G.): Brote de violencia en diversos puntos de Salethzira. Más tarde aparecen unos comunicados de un grupo rebelde llamado Krathlat anunciando su autoría de los hechos y exponiendo que su objetivo es conseguir neutralizar el "Tratado de libre movilización" para evitar la entrada de seres que quieran destruir las maravillas naturales de Salethzira. Al recibir la negativa empiezan los actos terroristas en forma de mutilaciones de Artesanos Superiores y la amenaza a Aspirantes e Iniciados de en caso de intentar seguir se les mutilará también. Estancamiento cultural. El complejo de los sabios empieza a envejecer y cada vez aparecen menos ideas, pero se perfeccionan los métodos clásicos.


(Final) Segunda guerra civil (Secta del Krathlat) (437 a.G.): Tras la destrucción del núcleo fuerte del Krathlat este pierde mucho de su poder y sus nuevos representantes acceden a dialogar con un consejo formado por artesanos de todos los rangos y por representantes de la población general. Se acuerda redactar un tratado en el que se manifieste la prohibición de destruir ningún bien natural (es decir nada) en Salethzira. Aún así un núcleo de ultrarradicales sigue con el movimiento Krathlista de forma secreta, con la creación de la Sectra del Krathlat.


Redacción del tratado de "Respeto a la vida" ( 437 a.G.): Se redacta el tratado de "Respeto a la vida" para finalizar la Segunda guerra civil también llamada Guerra de la Pérdida o Guerras Perdidas.La introducción del extenso redactado dice así:

Respeto a la vida

A partir de hoy y hasta que no aparezca un texto de carácter legal y aprobado por mas de dos tercios de la población fesfa de Salethzira queda terminantemente prohibida la tala, destrucción o mutilación de cualquier bien natural a no ser que esta le produzca un bien que no puede ser conseguido de otra forma al objeto de dicho daño o a un conjunto o unidad de sujetos más importantes para el equilibrio natural del ecosistema. Así también queda terminantemente prohibida la entrada a Salethzira de especies de plantas extranjeras pues se entiende que aparte de destruir el ecosistema, en Salethzira ya hay la mayor variedad de plantas del mundo conocido y no debe ser cambiada.
También se prohíbe el uso de herramientas abrasivas o dolorosas para los seres cuando se haga la poda anual o cuando se moldee la forma de las plantas para crear recintos habitables así como se prohíbe también la muerte de dicha planta para no tener que cuidarla y poder tener un hogar estable pero muerto. La demás cláusulas del tratado son comentadas más adelante debido a su menos carácter de importancia.

Detección y neutralización del núcleo fuerte del Keathlat (400 a.G.): Se detecta un movimiento sectario muy intenso en la zona de Las Espinosas. Un comité elegido en secreto se desplaza para investigar el alcance de estos movimientos, descubriendo un principio de insurrección violenta, que se corta rápidamente gracias a la rápida actuación de los Artesanos Superiores al organizar un comité de contención y su consiguiente facción pacificadora. Se neutralizan los sectarios y se envían al exilio.


Incorporación de la Gran Selva a Salethzira (300 a.G.): Se incorporan las tierras de La Gran Selva a la nación de Salethzira, entendiendo esta anexión como la posibilidad de ir y volver a través de Las Espinosas por los Pasos del Viento sin consecuencias hostiles por parte de ningún Fesfo de ambos lados de las grandes montañas.



Fuegos (250 a.G. – 150 a.G.): Grandes incendios azotan los bosques de la parte occidental de Salethzira. Estos incendios destruyen muchos árboles jóvenes pero los árboles más viejos resiste el embate del fuego con toda la dignidad posible. Los incendios son larguísimos durante el tiempo debido a la humedad de los bosques, que frena su avance.

Renacimiento (150 a.G.- 0 a.G.):
Periodo de unidad entre los Fesfos de toda Salethzira, incluidos los de la Gran Selva para reconstruir los terrenos devastados por los grandes incendios. A finales de este periodo aparecieron los humanos. Por suerte para ellos, Salethzira vivía unos tiempos muy convulsos, por lo que pocos humanos acabaron subyugados a algunos Fesfos. Mas más tarde fueron liberados, pues para evitar esa aberración, que según todos los gremios de artesanos debía estar prohibida se añadido otra cláusula al tratado "Respeto a la Vida" que dice así:

No se maltratará/dominará ni matará ningún ser, sea de la especie que sea bajo ningún concepto excepto que susodicho individuo amenace algún miembro de cualquier otra raza sin razón e intente provocarle algún prejuicio, así como se permitirá la violencia en caso de una declaración de guerra contra una nación o raza o defensa propia, quedando fuera del código moral Fesfo el ataque indiscriminado y las vejaciones a ajenos individuos.

Mystik

Arte y literatura:

Poesias:

Cántico de guerra


Allá donde vuestras manos no llegarán,
Allá donde vuestra esencia morirá,
Allá donde vuestra carne quemará,
Nosotros esperaremos.


Cuando todo acabe,
Cuando la noche muera
Cuando el mundo vea su último amanecer
Nosotros esperaremos.


Esperaremos...


Noches de luna que nos tiñen de plata,
Días de sol que nos doran la faz,
Esperando  tiempos que nos permiten vivir...
Nosotros esperaremos.


Desde la primera flor,
Desde la primera primavera,
Y hasta el último frío,
Nosotros esperaremos.

Mas el mundo no serán tinieblas,
La noche no será oscura
Las flores no marcharán...
Mientras nosotros esperaremos.


Esperaremos...


Pero al ver la destrucción de la vida,
Al ver el sufrimiento de La Madre
Al sentir la agonía del mundo,
¡No esperaremos!


Al ver el arrebato de la belleza,
La humillación de la naturaleza,
Nosotros y ella, nuestra esencia,
¡No esperaremos!

Y entonaremos este cántico,
Llenos de tristeza,
En la presta marcha hacia la batalla,
Porque entonces, ¡No esperaremos!








Fuego y hielo



Amar a la naturaleza,
En este mundo sin cuartel,
Es amar una belleza,
En medio de un burdel...

La vida es arrebatada,
Por seres sin razón,
Seres abominables,
Ingrata creación.

Y en ese pequeño instante,
En el arrebato de la ilusión,
Se comprenden muchas cosas,
Se comprende el dolor.

Comprensión penosa,
Sobre el cielo estival,
Bajo la nieve, celosa,
De que siempre hay rival.

Nuestras hojas marchitan,
Nuestra esencia puede arder,
Nuestras raíces se congelan,
Terrible perecer.


Y sin embargo se sigue,
Sin dar a nadie la esperanza,
Con las ganas de vivir,
Con las ganas de venganza...

Amar la naturaleza,
En este mundo sin cuartel,
Es amar una belleza,
Que se marchita al atardecer...


Wind_Master

Creo que este tipo de cosas le aportan personalidad al trabajo.
Sorry but you are not allowed to view spoiler contents.


Sorry but you are not allowed to view spoiler contents.




<- Este huevo dragón es legendario

Últimos mensajes

Adivina la película de Paradox
[Ayer a las 15:38]


Marvel Cinematic Universe de M.Rajoy
[25 de Marzo de 2024, 09:33]


Dos balas, una vida de Mskina
[21 de Marzo de 2024, 15:12]


El escritor escacharrado X de M.Rajoy
[19 de Marzo de 2024, 16:31]


Mafia, conceptos básicos e hilo de dudas de M.Rajoy
[19 de Marzo de 2024, 09:05]