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La Cadena Ser crea el programa de los 40 principales, un programa juvenil con 2 horas y ponen solo música, algunos críticos no le auguran un futuro muy prometedor a este programa.

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Alt.NWB - Archivo 2: La Fortaleza

Iniciado por ayrendor, 05 de Abril de 2011, 01:16

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YoYo

1. La Villa
2. El Invernadero
3. La Academia
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ayrendor


Tres golpes secos en la puerta alertaron a Xerim de la presencia de un visitante. La noche fue fructuosa, había conseguido fabricar dos prototipos que en esos momentos estaba revisando. Nadie había perturbado sus labores, ni siquiera su hermana dio señales de vida aquella noche. Se desperezó y salió del despacho mientras trataba de recuperar la movilidad de sus brazos. Tanto tiempo encorvado había producido un hormigueo constante en sus hombros que se extendía hacia los codos. Corrió el pestillo y deslizo la ligera puerta hacia el interior. Al otro lado, un joven pulcramente uniformado de azul celeste, esperaba con un sobre en su mano. La mitad inferior de su rostro quedaba oculta por una máscara con rejillas que le permitían respirar. 

-Buenos días, ¿es usted Xerim Argaisten? – preguntó con su voz metalizada debido al filtro que tenía aquel extraño protector.

-Soy Xerim, pero no pertenezco a los Argaisten – respondió él desconcertado por la pregunta.

-Me sirve. Tengo un mensaje para ti de Holibreo Argaisten – continuó el hombre, olvidándose rápidamente de los formalismos después de la afirmación del joven alquimista-. Quiere verte cuanto antes en la residencia de los Argaisten de "la Villa".

El mensajero le tendió la carta con un gesto repetido en cientos de ocasiones y se alejó sin despedirse. Xerim volvió al interior de la casa mientras examinaba el sobre. Posiblemente la carta explicara los motivos de la convocatoria, pero si era tan urgente, que se lo explicara en persona. Embaló los frutos de su trabajo cuidadosamente y los introdujo en su bolsa. No tendría tiempo de volver a casa si se olvidaba algo, así que incluso dedico un par de minutos a repasar mentalmente todo lo que debía llevar.


Casi una hora después llegó a la vigilada entrada de "la Villa". El sobre fue suficiente para que los hombres de la guardia privada, que ese día pertenecían a una familia menor, le permitieran el paso. Las calzadas, pavimentadas con adoquines granates, separaban antiguos caserones en los que se habían invertido gran cantidad de dinero. No había dos iguales, sus tamaños iban desde lo grande a lo descomunal. Los materiales utilizados variaban dependiendo de la antigüedad de la construcción. Xerim conoció años atrás a un alquimista que era capaz de situar cronológicamente la construcción de las casas solo examinando la roca con la que habían sido edificadas.  Una de las más arcaicas, situada precisamente en una posición privilegiada, era a la que Xerim se dirigía. En su entrada esperaban dos guardias armados con alabardas, los cuales habían sido advertidos de su visita. Uno de ellos le indicó amablemente que le esperaban en el jardín trasero.

Holibreo era un hombre sencillo que solía huir del barroquismo predominante en las altas esferas. Su vestimenta se limitaba a una túnica color crema ajustada con un cinturón de cuero. Conservaba algo de juventud en su rostro, a pesar de las canas que habían invadido su pelo antes de tiempo. Aquel hombre de gesto tranquilo se encontraba en aquellos momentos admirando un pequeño estanque en la zona central del jardín. Las flores creaban una tupida alfombra que surgía alrededor de pequeños caminos pedregosos. Algún que otro árbol había sido plantado en las áreas más alejadas para disimular el color gris el muro que cercaba la finca. Xerim fue recibido con una acogedora sonrisa de bienvenida.

-Me alegro de verte – dijo Holibreo mientras se inclinaba levemente en forma de saludo-. Espero no haber perturbado tus deberes.

-Podía permitírmelo si no desayunaba – replicó él sin darle importancia.

-Eso se puede solucionar fácilmente – agitó una mano y un sirviente apareció de la nada con una bandeja repleta de fruta y dulces-. Yo tampoco he comido nada aun.

Ambos se sirvieron en unos pequeños platos aquellos trozos que les parecieron más apetitosos. Xerim dio buena cuenta de su parte antes de que su acompañante pudiera apenas tocar su plato. Todo estaba delicioso, si le hubieran vuelto a traer la bandeja con gusto se la habría comido entera.

-¿Cómo esta tu padre? – le pregunto de improviso.

-No lo se, hace meses que no tengo ninguna noticia de él – le respondió Xerim mirándole a los ojos. En Holibreo, primo de su padre, podía reconocer algunos rasgos que también poseía su progenitor-. Está destinado bastante lejos como para recibir mensajes frecuentes.

-Por supuesto, seguramente se produzca una demora considerable – justificó el anfitrión, mintiendo descaradamente. Xerim sabía de sobra que su padre no era de los que enviaban cartas preocupándose.

Un silencio incomodo, roto solo por el  murmullo del agua, se interpuso entre los dos. Las relaciones familiares nunca habían sido el fuerte de Xerim. Si bien era cierto que guardaba un gran aprecio por Holibreo, el distanciamiento progresivo había afectado a su relación. 

-Imagino que no conoces el contenido de la carta – comenzó Holibreo tratando de romper el hielo. Xerim dejó que el silencio contestara a la pregunta-. Lo suponía – aceptó él con una exhalación-. Quería pedirte un favor. En primer lugar, quiero que sepas que tengo conocimiento de lo ocupado que te encuentras, y posiblemente te encuentres en un futuro. Sin embargo, han llegado a mí ciertas informaciones preocupantes de tu hermana.

-No soy quien para inmiscuirme en sus decisiones – cortó el joven sin dejarle continuar-. No le agradaría que nos interpusiéramos en su camino. Sin duda nos descubriría antes de intentarlo.

-Tu hermana es mucho más tozuda que tú. Y también más metódica – argumentó en respuesta-. Precisamente tú eres el único capaz de salirte de sus esquemas y observarla, incluso asistirla llegado el momento, sin que ella lo aprecie.

Xerim guardo silencio mientras reflexionaba sobre aquella extraña petición. ¿En que se habría metido su hermana para que le pidieran eso? Solo ella podía saberlo.  Preguntarle directamente no era una opción, en el mejor de los casos le arrearía un guantazo por entrometido.

-No te prometo nada, pero intentare estar atento – decidió Xerim sin pensarlo dos veces-. Después de todo soy su hermano. Si no lo hago yo, ¿Quién lo hará?


Cita de: Maxus en 17 de Marzo de 2012, 19:07Todos tenemos derecho a ser una personalidad de Ayr. Lo pone en algún sitio de la Constitución uhm

Cita de: PsyroUna vez un zubat atacó a rayd y estaba tan confuso que fue a casa de ayrendor a pegarle una paliza.

Cita de: Idunne en 17 de Enero de 2012, 17:52
Cita de: khalanos en 17 de Enero de 2012, 17:13
Cita de: Skiles en 17 de Enero de 2012, 16:33Bleach

one piece?

Jungle Wa Itsumo Hare Nochi Guu

ayrendor

Día 2

PdM – 22.

Tareas Obligatorias

• Visitar la Academia – 8.

Visitar "la Villa"  – 4.

Tareas Opcionales

• Visitar "La Manigua" – 7.

• Visitar "Los Corrales" – 7.

• Visitar "El Invernadero" – 7.



Se reabren las votaciones.
Debeis votar tres opciones enumeradas del 1 al 3.


Cita de: Maxus en 17 de Marzo de 2012, 19:07Todos tenemos derecho a ser una personalidad de Ayr. Lo pone en algún sitio de la Constitución uhm

Cita de: PsyroUna vez un zubat atacó a rayd y estaba tan confuso que fue a casa de ayrendor a pegarle una paliza.

Cita de: Idunne en 17 de Enero de 2012, 17:52
Cita de: khalanos en 17 de Enero de 2012, 17:13
Cita de: Skiles en 17 de Enero de 2012, 16:33Bleach

one piece?

Jungle Wa Itsumo Hare Nochi Guu

El tipo


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Lance

Academia
Invernadero
Corrales

ElTipo, venimos de la villa, no lo vuelvas a elegir  :O

Mime



ayrendor

#137

El despacho de Nawqo Navayin tenía una decoración más propia de un coleccionista de arte que de un alquimista. Un gran número de esculturas, cuyo tamaño iba desde un palmo hasta los dos metros, habían sido distribuidas estratégicamente por el amplio espacio. Unas pocas eran de piedra y representaban a famosos alquimistas, sin embargo, la mayoría eran figuras abstractas realizadas a partir de metales. Cuando Xerim entró en la habitación tuvo que guiarse por las voces para llegar al fondo. Moritaka y Nawqo le esperaban sentados en una discreta mesa de trabajo. Tras ellos un enorme ventanal proporcionaba una vista privilegiada del Este. Era la primera vez que visitaba un despacho con esas peculiares características. Había que reconocer que aquel hombre se salía de lo habitual.

-Por fin has llegado – dijo con cierto descontento Moritaka-. Temía que hubieses cambiado de idea.

-Me han retrasado asuntos familiares – respondió Xerim mientras clavaba su mirada en los ojos de su interlocutor-. He traído dos prototipos, además de los planos definitivos.

Xerim vació el contenido de su bolsa sobre la mesa. Desenvolvió con especial mimo los prototipos y los depositó frente al miembro del Rombo. Él los examinó manualmente mientras comparaba los modelos y los planos. Moritaka parecía tener un resorte en su asiento que estaba a punto de catapultarle hacia delante. Dirigía miradas nerviosas a su alrededor, como si tratará de encontrar alguna mirada indiscreta oculta en las sombras del despacho. Xerim no estaba nada cómodo con aquella situación, aunque trataba de pensar lo menos posible en ello.


El examen se alargo casi durante una hora. Nawqo murmuraba cosas que era imposible descifrar de vez en cuando, y otras veces hacían preguntas técnicas que Xerim respondía contundentemente. Finalmente el viejo alquimista pronunció su veredicto.

-Esto pasará la prueba mañana – dijo mientras Moritaka soltaba un suspiro de alivio-. Sin duda apoyaré el proyecto, es un gran trabajo.

-Eso pensé yo al verlo – intervino el Cirk sonriendo-. Podría convertirse en una herramienta universal para los alquimistas.

-Podría, podría,...sin embargo, creo que le falta algo – replicó cuando todo parecía a favor de Xerim-. Toma, haz una prueba con esto.

Xerim recogió el prototipo que el viejo le tendió. Buscó en su bandolera con la mano que le quedó libre hasta encontrar la caja donde guardaba algunos elementos básicos. La abrió, y extrajo un frasco de líquido incoloro y algo de polvo blanco. Tras preparar los compartimentos con una cantidad prudente, se alejó de la mesa para prevenir accidentes.  Tomó aire lentamente, si aquello era un desastre iba a lamentarse durante mucho tiempo. Pulsó el botón que servía de gatillo al mismo tiempo que apuntaba a una zona despejada. El sonido que surgió del aparato fue tan satisfactorio como sorprendente. La combustión que había pretendido crear fue un éxito, el aparato funcionaba perfectamente. No obstante, el sonido de madera quebrándose le heló la sangre. ¿Qué había mal en el diseño? Había revisado los planos mil veces, no tendría porque romperse con la distribución actual.

-Lo imaginaba – dijo desde su silla Nawqo con cara de satisfacción-. La madera es demasiado frágil para aguantar la presión. ¿Has pensado en usar metal?

-Demasiado pesado para muchos de sus usos – contestó Xerim, dirigiéndole la palabra por primera vez al alquimista veterano-. Además su mantenimiento plantearía muchos problemas.
-Entonces necesitas algo que regule la energía que el armazón habrá de soportar – dictaminó Nawqo mientras señalaba en el plano donde debería ubicar el estabilizador-. Algo como la savia de árbol Gumm, o fragmentos de diamante rojo.

Xerim asintió en silencio. Conseguir ese tipo de materiales no era fácil. La savia de árbol Gumm, la cual no era precisamente abundante, era recolectada con mucho recelo por las autoridades de la ciudad. Los diamantes rojos eran abundantes, aunque se recolectaban lejos de la ciudad y su precio no era algo que él podía asumir. Por otro lado, los diamantes eran muy inestables. Nada aseguraba que fueran a funcionar perfectamente. Para cuando Nawqo se despidió de ellos dos, Xerim tenía un nuevo plan en la cabeza. Aun tenía algo menos de un día para conseguir su objetivo.


Cita de: Maxus en 17 de Marzo de 2012, 19:07Todos tenemos derecho a ser una personalidad de Ayr. Lo pone en algún sitio de la Constitución uhm

Cita de: PsyroUna vez un zubat atacó a rayd y estaba tan confuso que fue a casa de ayrendor a pegarle una paliza.

Cita de: Idunne en 17 de Enero de 2012, 17:52
Cita de: khalanos en 17 de Enero de 2012, 17:13
Cita de: Skiles en 17 de Enero de 2012, 16:33Bleach

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Día 2

PdM – 14.

Tareas Obligatorias

Visitar la Academia – 8.

Visitar "la Villa" – 4.

Tareas Opcionales

• Visitar "La Manigua" – 7.

• Visitar "Los Corrales" – 7.

• Visitar "El Invernadero" – 7.



Se reabren las votaciones.
Debeis votar tres opciones enumeradas del 1 al 3.



Cita de: Maxus en 17 de Marzo de 2012, 19:07Todos tenemos derecho a ser una personalidad de Ayr. Lo pone en algún sitio de la Constitución uhm

Cita de: PsyroUna vez un zubat atacó a rayd y estaba tan confuso que fue a casa de ayrendor a pegarle una paliza.

Cita de: Idunne en 17 de Enero de 2012, 17:52
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Cita de: Skiles en 17 de Enero de 2012, 16:33Bleach

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