Vampiro: La mascarada. El ojo de Caín. 3ª noche.

[Khram Cuervo Errante]

- ¿¿Sabes quién coño levanta esta barrera?? ¡¡Es el mismísimo Abel!! ¡¡No puedo nada contra sus poderes!!

[Thylzos]

Ve con asombro el brusco cambio de humor de Angelique y pone más empeño en cuidar su espalda, no vaya a ser que le caiga algo a él, como de costumbre.

[Faerindel]

-¡Argh! (Desactivo auspex, que esas cosas pican)

Voy hacia la salida (ergo, hacia la barrera), e intento averiguar qué es esa dichosa barrera (¿percepción+ocultismo? Lo que sea que haya que tirar) y más aún, como se tira abajo.

-¿Abel? No me jodas...

[Poison Gilr]

Perdón, estaba de mudanzas

[uso, si hay alguna, disciplina para romper la barrera]

[Psyro]

Perdón, estaba de mudanzas

[uso, si hay alguna, disciplina para romper la barrera]

Si, coño. La habilidad Excavar. La aprendían digglet y dugtrio en trono al nivel 20.

[Poison Gilr]

[Minerva]

Me adelanto un poco al grupo, uno o dos pasos.

-Buenas noches Abel. Ya estamos aquí. Uno de tus chiquillos me dio una caja hace dos noches en una maternidad de Madrid. Fue muy amable conmigo, y me hizo feliz dejandome pasar un rato en aquella habitación aunque sólo pude tomar la caja. No hubiera supuesto una amenaza para sus guardados, ya lo sabes, y si puedes leerme la mente lo sabes aún mejor. Estamos aquí para ver qué contenía tu encargo. En el cementerio de la Almudena otro de tus chiquillos nos echó otro cable para seguir buscando. Trabajamos a las órdenes de Monseñor, a quien has dejado fuera de esta barrera. Sé que un hombre justo no necesitaría atraernos por medio de trampas y que no buscaría la venganza, así que apelando a la justicia te pido por favor que nos ayudes a abrir la caja y ver el contenido que probablemente tu mismo nos has enviado. Me acerco a Angelique -Angelique, querida, dejame la caja, por favor -Si me la deja la muestro -Abel, sin tu ayuda no podremos concluir el trabajo que nos ha sido encomendado

Khram Mp

[Khram Cuervo Errante]

El interior de la iglesia se ilumina con una luz cálida y agradable. El viejo órgano empezó a tocar una sonata tan antigua como el mismo tiempo, llenando los corazones de todos los que la escucharon de una sensación de paz inmensa y profunda.

La atmósfera de tensión se relajó por unos momentos y todos y cada uno de los presentes pudieron admirar la belleza románica del templo, que había visto siglos pasar por sus bóvedas y arcos. Una mujer de extraordinaria belleza apareció ante el altar de la iglesia, con gesto serio y adusto.

- No sois bienvenidos aquí, vástagos de Caín. Pero Abel, aquel a quien vuestro primer maestro asesinó vilmente, ha oído vuestras palabras y ha escrutado vuestros corazones. Algunos de vosotros no sobreviviréis a esta noche, tragados por vuestra propia iniquidad. Otros quizá consigáis algunos de vuestros anhelos más secretos. Y otros simplemente olvidaréis lo que ocurra en esta cruzada.

"Está claro que ahora viajamos en el mismo barco. Todos queremos evitar las consecuencias de esta situación."

Unos crujidos y unos sonidos deslizantes resuenan en el templo, acabados con un sonoro "clac".

- Abierto está el enigma.

[Thylzos]

Miro sorprendido a todas partes y entendiendo lo justo para barajar la posibilidad de que Sofía en realidad sea malkavian y esté irremediablemente loca. Decido pasar desapercibido, así que me quedo quieto detrás de Angelique.

[Poison Gilr]

Se la nota relajada. con una media  un gesto despreocupado. De entre sus labios se desliza una palabra.

-Abel...